domingo, 1 de marzo de 2009

¿Vida o Sueño?

¡Ufff! Por poco pensé que ya me había entrado la pereza "bloguera" y que no iba a escribir nunca más... pero no, aquí estoy de nuevo.
Como mi fin de semana no ha tenido nada especial (un poco de surf por aquí, natación por allá, y los deberes de la universidad) voy a hablar de un tema que me persigue desde hace mucho mucho tiempo...
Todos sabemos lo que es soñar mientras uno duerme, todos conocemos esa sucesión de imágenes, a menudo sin sentido, que recorren nuestras mentes por la noche. Pero, para soñar, ¿es necesario ver? ¿es necesario percibir imágenes del mundo que nos rodea para luego poder recrearlas en nuestro subconsciente? Yo creo que sí. Sería absurdo, desde mi punto de vista, soñar con un león que nos persigue por la sabana africana si nunca hemos visto un león ni hemos oído hablar de África. Sin embargo, ¿no os ha pasado nunca que soñais algo y luego, tras días, semanas o meses, os encontrais en la realidad frente a esa misma escena que soñasteis?A mí, que soy un bicho raro, me ha ocurrido varias veces. Es increíble, te quedas parado y te das cuenta de que eso ya lo "has vivido" un vez en un sueño.
Por otro lado, soñar me parece algo fascinante por el simple hecho de que, mientras lo hacemos, rompemos las leyes de la física, dilatamos el tiempo, y hacemos que los segundos se conviertan en minutos y los minutos en horas. Otra experiencia personal es la de apagar el despertador para estar en la cama cinco minutos más, caer dormido de nuevo, y tener un sueño en ese brevísimo intervalo (unos minutos) en el que el despertador permanece en silencio.
También ocurre que, en ocasiones, un sueño parece tan real que en el mismo sueño me pregunto si estoy soñando o viviendo, y después de comprobar erróneamente en el sueño que estoy viviendo la realidad me despierto poco después decepcionado y riéndome de como he sido engañado. ¿Qué diferencia hay entre soñar y vivir? Descartes desconfiaba de la realidad porque decía que no podía encontrar método alguno para distinguirla de los sueños: "No hay indicios ciertos para distinguir el sueño de la vigilia, por lo que resolví fingir que nada de lo que hasta entonces había entrado en mi mente era más verdadero que las ilusiones de mis sueños."
De la misma manera desconfiaba Calderón de la Barca en La vida es sueño: "¿Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Un ilusión, una sombra, una ficción, y el mayor bien es pequeño: que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son."
Si eso es cierto, ¿qué ocurrirá el día que despertemos del sueño de la vida? ¿con qué nos encontraremos? Pero aún hay más. Si nosotros estamos confusos porque no podemos interpretar nuestros sueños, ¿qué ocurrirá con las personas ciegas de nacimiento incapaces incluso se saber lo que están soñando? ¡Pero qué me digo! Al principio del texto comentaba que es necesario ver para soñar, entonces ¿qué sueñan los ciegos? Además, en el caso de que soñaran ¿cómo podrían explicarlo si no tienen las palabras que necesitan? Pongamos un ejemplo: Soñamos con un globo amarillo que flota en el aire y está unido an una cuerda gruesa de color acero cuyo extremo opuesto está atado a un bloque de cemento que reposa en un lateral de una acera cuyos límites se prolongan hasta el horizonte en un paisaje bañado por la intensa luz del sol, que brilla en medio de un precioso cielo azul. A ambos lados de la acera no hay más que explanadas de césped verde infinitamente extensas que se mueven al son de un viento fortísimo que resuena en nuestros oídos mientras las briznas de hierba se levantan en el aire. Pues bien, si le preguntamos al ciego "¿Qué has soñado?" ¿Qué respuesta habríamos de esperar? De entrada hay que partir de que un ciego no conoce los colores. Que alguien intente describir un color sin incluir en su definición alguno de los elementos de la naturaleza. De hecho, si nos vamos al diccionario de la RAE, el color verde, por ejemplo, se define en su primera acepción como: " De color semejante al de la hierba fresca, la esmeralda, el cardenillo, etc. Es el cuarto color del espectro solar." Es decir, es imposible definir un color sin una comparación, pero como el ciego carece de toda esa información nunca pordrá conocer la esencia de los colores.
Continuando con nuestro panorama, de entrada el ciego se sentirá confuso por lo que acaba de ver. Una linea recta y ancha que carece de límites sobre la que reposa una extraña figura y a cuyos lados hay una superficie distinta en constante movimiento de la que se levantan pequeños objetos. ¿qué nos hace pensar que el ciego no confundirá la explanada de hierba con el mar? Los únicos conceptos del mar que tiene el ciego son el color azul (que nos es inservible, ya que nuestro personaje puede pensar que el verde que tiene ante sus ojos se trata en realidad del color azul), el rugir de las olas, sutituído ahora por el rugir del viento en sus oídos, y el movimiento del agua, reemplazado por el de la hierba. Lo mismo ocurrirá con el globo y el bloque de cemento, que podrían formar perfectamente una farola. Y así con infinidad de cosas distintas que el ciego experimenta cada día. Sin duda alguna, privar a alguien del placer de la vista es como condenarle a vivir una vida incompleta, a la mitad.
Como dice mi madre: "Siempre hay gente que está peor que tú". En cuanto me lo dice la mando a freir espárragos, pero tiene razón. El simple hecho de que estemos sanos y podamos difrutar al cien por cien de las posibilidades que nos ofrecen nuestros cuerpos es más que suficiente como para vivir constantemente con una amplia sonrisa en la cara.
No es fácil, pero hay que intentarlo.

7 comentarios:

  1. No olvides el olfato, que a veces ayuda a distinguir la carne del pescado, el verde del azul, la hierba de las olas...

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  2. Sin palabras, no tengo palabras.
    Ahora, un consejo, no le sueltes estas cosas a las chicas esas que decías que había por ahí, o te verás 'ditched' más veces de las que deserías.

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  3. Parece que la mente humana no tiene límites. Desde luego, ¡la de David no tiene límites!
    Yo, sin embargo, creo que los ciegos sueñan. Quizás no sueñen con las formas y colores que nosotros conocemos, su capacidad de percepción a través de los otros sentidos es muy superior a la nuestra. Nosotros creamos las imágenes de los sueños (son los "movies"), del mismo modo los ciegos crearán sus "feelies" algo parecido a lo que cuenta Aldous Huxley en "Brave New World".
    ¿No habéis estado nunca en un cine en cuatro dimensiones? Esa brisa, ese agua que salpica, esos hilillos que te hacen cosquillas o te pican en las piernas, esa repentina sacudida,...
    ¡Cuánto nos falta por explorar de la mente humana! Y, aún así, a veces pensamos que lo sabemos todo.
    Besos, Ana.

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  4. Los ciegos no ven ni perciben el mundo de la misma forma que lo puedas hacer tu. Sin embargo, el desarrollo de los otros sentidos es superior al tuyo. Dicho de otra manera, los ciegos ven la realidad a traves del tacto o del oido y es posible que aún no viendo los colores, como bien dices, los sientan. O incluso perciban sensaciones de las que tu eres incapaz. Joaquín Rodrigo era ciego y la música del concierto de Aranjuez está llena de color, olor y sabor. No es más ciego el que no ve sino el que no quiere ver.

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  5. Paloma, realmente no le voy contando a la gente este tipo de "rollos", y menos cuando acabo de conocer a alguien. Pero, cuando estoy entre amigos, me sorprende que mientras hablamos de temas profundos (que no es algo muy frecuente) la gente escucha, porque en el fondo (y me estoy refiriendo a las preguntas que revolotean por nuestra mente en última instancia) todas las personas tienen interrogantes parecidos, por no decir iguales. Eso sí, a menudo la gente no se para a pensar en ello, lo que hace que las posibilidades de quedarse "ditched" y hablando solo sean bastante altas jajajaja!

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  6. Me he quedado sin habla, menuda reflexion... de tales palos, tal astilla.
    La verdad es que a mi siempre me ha interesado mucho el tema de los sueños, hasta llegué a comprarme un libro para interpretarlos... para mi, está claro que estan relacionados con vivencias que has tenido anteriormente.
    Y el "déjà vu" a mi siempre me ha paralizado por un momento, es una franja muy corta de tiempo, lo justo para pensar: esto yo ya lo he visto... y dudar por un segundo si lo siguiente que recuerdas va a pasar...
    Hay tantas cosas en la vida que merecen una reflexion...

    Besitos,
    Susana

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  7. Ana, ya estás mayor. Les dices a tus hijos cosas que decía tu padre... En fin, que es muy interesante leer estas reflexiones de David. Mis hijos dicen que le ha dado un yuyu a su primo, y eso que solo han leido el primer texto. Ya les obligaré a seguir. Besos a Todos. Jaime

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